jueves, marzo 10, 2005

Un juego de Joaquín Vicente

Es fabuloso cuando uno termina avanzando a gatas por la calle y aunque sabe que se está ensuciando las uñas con el polvo del suelo, prefiere eso a caminar en dos piernas, con el riesgo de caerse de trompas.
En mi caso prefiero caminar como la especie que soy, no porque crea demasiado en Darwin, sino por mero valor.
Así que aquí está un ejemplo de los costalazos que me doy contra el suelo. Para mover a Joaquín Vicente hacia un extremo u otro de la pantalla y evitar así que se rompa la boca contra el asfalto, sólo mueva el mouse de un lado pa otro.
El Joaquín Vicente Borracho